Si quieres que tus filetes de ternera queden muy, muy jugosos y suaves la mejor forma de conseguirlo es cocinarlos en salsa a fuego lento para que el colágeno de sus fibras se gelifique y te quede una carne extremadamente tierna y delicada.
Esta salsa es muy sencilla y está elaborada con tres ingredientes básicos de nuestra gastronomía: ajo, perejil y un buen vino blanco. El ajo, es uno de mis ingredientes obligados en casi todas las recetas ya que a parte de aportar sabor en más o menos intensidad -según se prepare- es un extraordinario aliado para el aparato digestivo previniendo inflamaciones estomacales e intestinales, que junto con el verde y fresco perejil, rico en vitamina C y generoso antioxidante te ayudará a aumentar las defensas.
Estos filetes de ternera en salsa serán mucho más sabrosos si los preparas un día antes y si los presentas con unas crujientes patatas fritas será un plato más que perfecto para toda la familia.
¿Quieres unas patatas crujientes por fuera, cremosas por dentro que mantengan todo su sabor?
Reglas indispensables:
- Una vez lavadas, seca muy bien las patatas, el agua es uno de los grandes enemigos del aceite.
- Corta unos bastones más bien gruesos y cortos. 5 cm de largo por 1,5 de ancho.
- La fritura ha de ser en dos tiempos: la primera a temperatura relativamente baja y una segunda con el fuego alto.
- Las patatas nunca deben apilarse unas encima de otras en la sartén ya que enfriará drásticamente el aceite y no conseguiremos nuestro objetivo.
- Reposo de 20 minutos entre las dos frituras.
- Comer recién hechas.
- Sazonar siempre al final.
Ahora vamos a cocinarlas paso a paso:
Lava, seca y corta la patata. Coge una sartén con abundante aceite de oliva -el aceite debe cubrir prácticamente las patatas– cuando esté caliente, unos 140º añade las patatas. Si no tienes un termómetro que mida la temperatura será difícil que aciertes en los grados, un truco es sumergir un trozo de miga de pan, si éste se hunde lo habrás logrado, si de lo contrario el pan sube, la temperatura estará entre 170º – 180º, por lo que deberás disminuir la intensidad. Ahora pon las patatas y cocínalas durante 12-14 minutos hasta que adquieran un tono con aspecto gelatinoso y brillante. Retira a una fuente cubierta con papel absorbente y deja reposar 20 minutos.
Sube la intensidad del fuego –esta vez necesitamos que el aceite esté muy caliente- echa las patatas poco a poco y cocínalas durante dos minutos o hasta que veas que todo su exterior está firme y crujiente. –personalmente me gusta aplastar alguna con el tenedor para conseguir texturas diferentes.
Retira a un plato con papel absorbente, sazona inmediatamente y sírvelas con tus filetes de ternera en salsa.
Ingredientes
Para 4 personas
• 8 filetes de ternera pequeños
• 3 dientes de ajo
• un manojo de perejil
• 1/4 vaso de vino blanco
• 1/4 vaso de agua
• 1 cdta. de harina
• sal
• pimienta
• aceite de olivaDificultad
BajaTiempo de preparación
30 minutos
Pasos:
1. Enharina todos los filetes sacudiendo el exceso para que solo quede una finísima capa.
2. En una sartén muy caliente con un cordón de aceite de oliva márcalos durante 30 segundos por cada lado y reserva. Esto se hace para sellar el exterior y que todos los jugos permanezcan en su interior.
3. En una cazuela añade un par de cucharadas de aceite de oliva y fríe los ajos muy picaditos. Cuando empiecen a dorar añade el perejil y da un par de vueltas. Incorpora una cucharadita pequeña de harina y fríela durante un minuto sin parar de remover.
4. Ahora vierte el vino y deja que evapore el alcohol durante un par de minutos, después añade el agua y mezcla.
Introduce la ternera, salpimienta al gusto, cierra la tapadera y cocina a fuego medio durante 45 minutos. Si prefieres usar una olla rápida, una vez suban las anillas baja la intensidad y deja 10 minutos más.
5. Sirve tus filetes de ternera en salsa con unas crujientes patatas fritas y verás como la carne se deshace en tu boca.
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