Desde hace unos años una vez a la semana nos reunimos un grupo de mujeres de distintas nacionalidades para desarrollar la concentración, la positividad emocional y tener una visión más verdadera de la naturaleza de las cosas a través de la meditación guiada de nuestra maestra, gurú, mentora y muy, muy querida amiga Estrella.
Las mañanas que pasamos juntas son una inyección de estimulación, creatividad, fuerza y extraordinarias experiencias para todas las que compartimos este mágico tiempo. Después suelen surgir cafés, comidas, cenas o reuniones alrededor de una mesa para celebrar, festejar, recibir o despedir algo o alguien, y por supuesto en esas celebraciones siempre me ofrezco para cocinar y diseñar un menú apropiado y delicioso.
En esta ocasión el motivo de juntarnos para comer ha sido una despedida; Daniela, nuestra argentina favorita, se nos va a vivir Miami. Desmonta su casa, apila sus recuerdos, toma a su familia de la mano y se marcha nada más y nada menos que a 7000 kilómetros de distancia, algo lejos para poder seguir reuniéndonos todas las semanas. Pero aunque se marcha para no regresar en mucho tiempo, nos deja un montón de bellos recuerdos, una infinidad de palabras aterciopeladas con su suave acento argentino y sobre todo nos deja su buena y hermosa estela vibrante en nuestros corazones y para toda la eternidad.
Para ella, para ti, Daniela, he preparado este sabroso osobuco de ternera estofado y es que no podía ser de otra manera, como buena argentina ¡tenía que elegir una receta de carne! Lo he cocinado lentamente, con mucha suavidad y sin tener presente las manillas de un reloj, ya que solo así se consigue que todos los sabores de sus ingredientes se concentren en uno solo para regalar un estofado de primerísima calidad.
Después están los acompañamientos: unas patatas horneadas con mantequilla y aceite, unos champiñones dorados y tiernos y como toque final pequeñas explosiones de granada que llenan el paladar de frescura. Una receta que a partir de ahora siempre que la prepare recordaré con infinito agrado y ternura el día que compartimos todas juntas.
¡Ten buen viaje amiga, Daniela. Sé inmensamente feliz!
Los ingredientes
Para 4 personas
• 4 rodajas de osobuco de ternera
• 2 cebollas
• 5 zanahorias
• romero fresco
• perejil
• 2 vasos de vino blanco
• 1/2 vaso de caldo de huesos
• aceite de oliva
• salPara el caldo de huesos
• 2 litros de agua
• 1 cebolla
•4 dientes de ajo enteros sin pelar,
• 3 huesos blancos de vaca
• 2 huesos de jamón
• 3 huesos de espinazo sin sal.Acompañamiento
• 400 gramos de champiñón
• 3 dientes de ajo
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• sal• 1 pimiento rojo italiano
• 1 pimiento verde italiano
• 5 cucharadas de aceite de oliva
• sal• 5 patatas grandes
• 1 cebolla roja
• 3 cucharadas de mantequilla
• 3 cucharadas de aceite
• 10 dientes de ajo
• 2 ramas de tomillo
• sal• 1/2 granada
Dificultad
MediaTiempo de preparación
15 minutos más 2 horas de cocción
El día anterior prepara un sabroso caldo.
Lava los huesos e incorporarlos junto a una cebolla y los ajos a una cazuela. Añade el agua y desespuma hasta que el agua hierba limpia. Cuando hayas retirado todas la impurezas cierra la olla a presión y deja que se cocine a fuego medio al menos 2 horas. Conserva en lugar frío hasta el día siguiente.
Por la mañana, verás que toda la grasa ha subido a la superficie y se ha formado una capa blanquecina. Te resultará muy fácil retirarla porque se ha solidificado con el frío. Calienta de nuevo a fuego lento, retira los huesos y después pásalo un par de veces por un colador de maya fina.
¡Ya tienes listo un delicioso caldo con un intenso sabor que hará crecer todos tus platos!
Preparación:
1. Sazona el osobuco. Calienta 3 cucharadas de aceite de oliva en una sartén y cuando comience a humear añade el osubuco, séllalo durante un minuto sin moverlo… después voltea para sellar el otro lado y hazlo también por los lados. De esta manera cerramos toda la parte exterior para que los jugos y sabores permanezcan en el interior. Haz esta operación con cada pieza y de manera independiente para evitar enfriar la sartén.
2. En una cazuela grande pon 4 cucharadas de aceite de oliva y rehoga durante 2 minutos la cebolla, la zanahoria y un par de ramitas de romero.
Vierte el vino, deja un par de minutos que evapore el alcohol y seguido el agua. Cuando vuelva a coger temperatura sumerge las piezas de osobuco, cubre parcialmente con una tapadera y deja que se cocine todo junto durante 2 horas o hasta que la carne esté extremadamente tierna.
3. Traslada la carne a una cazuela con gran parte de los líquidos. Retira el romero y tritura con un batidor de mano la cebolla y la zanahoria hasta conseguir una salsa suave y ligera. Si fuera necesario incorpora más liquido, siempre es mejor añadir que pasarse.
4. Ahora prepara los acompañamientos.
Primero corta los pimientos en tiras, después en dados y fríelos en aceite de oliva. Una vez listos transfiérelos a un colador de malla fina para eliminar el exceso de aceite, sazona y reserva.
4. Los champiñones; pica muy menudito los ajos, dóralos en un par de cucharadas de aceite de oliva e incorpora los champiñones cortados por la mitad. Cocina hasta que se tornen dorados y algunos lados se tuesten ligeramente. Ve desechando el agua que sueltan para que no se cuezan y queden bien fritos.
5. Las patatas: Pela y pártelas en trozos grandes. Pon a hervir agua con sal y cuece las patatas durante 15 minutos. Escurre, deja templar durante dos minutos para que sequen y transfiérelas después a una fuente de horno.
Derrite la mantequilla con el aceite y pincela las patatas. Esparce los dientes de ajo enteros sin pelar, las hojas de tomillo, la cebolla roja laminada, sazona al gusto y hornea durante 35 minutos a 180º. Cinco minutos antes saca la fuente del horno, voltea las patatas y aplástalas con un tenedor, vuelve a pincelar con la mantequilla y el aceite e introduce de nuevo en el horno, pero esta vez enciende el grill para que se doren bien.
5. Desgrana la granada. Una forma rápida de hacerlo es rodarla sobre la mesa presionando con la palma de la mano, después se corta por la mitad y con la mano de un mortero se golpea con fuerza, verás como todos los granos caen rápidamente.
Mezcla los sabores y disfruta de este sabroso osobuco de ternera estofado.
Feliz viaje, Daniela, ojalá que la vida nos vuelva a reunir.
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