Tallarines con salsa de calabaza y guisantes
Cada día descubro que la comida nunca podrá ser monótona ni anodina. Cuando digo a mis amigas que en casa es difícil repetir un plato en todo un mes, se echan las manos a la cabeza. Pero esto no quiere decir que en casa comamos cosas extravagantes o muy diferentes, ¡para nada!, simplemente, me permito jugar con los ingredientes y los colores que veo en los mercados para crear platos deliciosos, saludables y por supuesto atrayentes a las miradas, como estos sencillos tallarines con salsa de calabaza y guisantes que son excitantemente agradables y bonitos.
Ahora estamos en plena temporada de calabaza, a la que llaman la cenicienta de las verduras, así que mi consejo es que no dudes en comprarla y asarla al horno con frescas hierbas aromáticas, o hacer con ella una aterciopelada crema, una sopa, o un postre. Además esta verdura contiene un 90% de agua en su composición, muy pocas calorías y su contenido en hidratos de carbono también es bastante escaso.
Igualmente la calabaza es un alimento extraordinario que nos ofrece una riqueza de vitaminas y minerales que no debemos desaprovechar; así que anímate a preparar confituras, ponerla cruda en tus ensaladas o freír sus semillas en aceite de oliva para obtener un saludable tentempié.
Ingredientes
Para 6 personas
• 500 gramos de tallarines
• 1 rodaja gruesa de calabaza (350 gramos)
• 1 cebolla grande
• 200 gramos de guisantes frescos
• 1/2 cucharada de cúrcuma en polvo
• copos de chile (opcional)
• 100 ml de nata baja en grasa
• 1 vaso de caldo de verduras casero
• 1/2 vaso de leche
• aceite de oliva
• sal
• pimienta
• 1 pizca de nuez moscadaDificultad
FácilTiempo de preparación
35 minutos
Pasos:
1. Cocina los tallarines al dente y reserva.
2. En una sartén pon a calentar tres cucharadas de aceite de oliva y rehoga la cebolla cortada en brunoisse (pequeños dados de un centímetro y medio aproximadamente) y la calabaza rallada. Salpimienta al gusto y si eres amante del picante añade unos copos de chile para darle un toque bravo.
3. Cuando consigas una textura tierna y blanda añade los nata, el caldo de verduras, la leche, y cocina hasta obtener la apariencia de un puré ligero.
4. Incorpora los tallarines e integra suavemente para que la pasta se impregne de estos deliciosos sabores.
Escalda los guisantes y añadelos a tus tallarines con salsa de calabaza
Ahora… a disfrutar!!
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