El frío gélido que nos ha traído el temporal de nieve ‘Filomena’, me ha recordado unas vacaciones de invierno con mi familia en una de las ciudades más bellas de Europa, Praga.
Cada tarde, al caer la luz, hacíamos una parada en algunos de los puestos de vino caliente que hay repartidos por sus plazas y calles. Un sorbo de esta deliciosa bebida dulce y delicadamente especiada, nos producía al instante la calidez que nuestro cuerpo necesitaba. Canela, cardamomo, anís, nuez moscada, cítricos, vino y su ron checo Tuzemský , es la pócima mágica que suavemente calientan los praguenses para ofrecérselo diariamente a todos los transeúntes.
Si nunca has tenido la oportunidad de probarlo, hoy, puedes hacerlo. Solo necesitas cinco minutos para prepararlo y diez minutos más para calentarlo lentamente sin que llegue a hervir. Una vez sientas el calor del vaso en tus manos y respires sus intensos aromaras, sabrás que vas a estar enamorada de este vino caliente especiado para siempre.
Los ingredientes
1 litro de vino tinto
1/2 manzana cortad en rodajas
1 naranja cortada en rodajas
zumo de una naranja con su ralladura
ralladura de medio limón
2 ramas de canela
2 semillas de cardamomo aplastadas
1 anís estrellado
1 ramita de romero
Pizca de nuez moscada
100 gramos de azúcar moscabadoDificultad
BajaTiempo de preparación
15 minutos
Paso 1
Pon a calentar todos los ingredientes en una cazuela evitando que llegue a hervir y remueve ocasionalmente para que las especias liberen todo su sabor.
Paso 2
Cuando comience a humear baja la intensidad del fuego y mantén al calor diez minutos mas.
Paso 2
Prueba y rectifica el dulzor a tu gusto.
Presenta en vasos resistentes al calor y si tienes niños en casa, sustituye el vino, por zumo de uva roja.
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