Un año más no puedo evitar escribir a sus Majestades los Reyes Magos de Oriente para pedirles que me traigan caprichos para mi cocina, que me faciliten la vida y aceleren mi trabajo. Soy de esas mujeres a las que no les importa recibir unos excelentes cuchillos, una variedad de fuentes para servir, y si me apuras, también unas buenas sartenes. Casi me atrevería a decir que me ilusiona más, que recibir un jersey de cashmere, un bolso o un perfume. Y es que. . . ¡todo es insuficiente para el mágico mundo de mi cocina!
Existen infinidad de artículos que cuando los conoces y utilizas, no entiendes como has podido vivir sin ellos. Sin ir más lejos hace unas semanas paseando con mi madre por el centro de Madrid, entramos en una tienda y vimos un rallador para limón donde su diseño y ergonomía solo permite extraer la parte de la piel donde se encuentra todo el perfume y todo su aroma. ¡Y voilá…! ¡¡Es la absoluta perfección!! Da igual que te guste más o menos cocinar, hay productos que son definitivamente indispensables y exageradamente útiles.
Así que siguiendo la tradición de mis regalos, éste año he pedido una fuente de cocción vapor y una maravillosa cafetera pistón de diseño, que vi en la majestuosa e impecable exposición de la firma WMF, donde disfruté como una niña con todos sus lujosos, prácticos y cautivadores productos. Casi me atrevería a decir que entrar ahí y verme rodeada de esas lineas tan puras, brillantes y resplandecientes, fue como estar viendo boutiques en Rodeo Drive, Beverly Hills o en la mismísima Quinta Avenida de mi querido NY.
¡Soy inmensamente feliz! descubriendo cada nuevo ingenio que hace que mi vida a la hora de cocinar sea mucho, muchísimo más fácil. Todos sus artículos están pensados para cuidar al detalle cada plato y realzar los sabores de cada ingrediente. Sí, sí, ¡realzar los sabores! Porque no es lo mismo cocinar una pieza de ave, de carne o de pescado en una cazuela convencional, que hacerlo en una rustidera o besuguera específica, que ha sido pensada, diseñada y preparada para ello.
Mis amigas dicen que soy una exagerada, pero yo, siempre les hago la misma pregunta –¿Cuando os vestís de fiesta para una cena de gala elegís los zapatos más adecuados al vestido?, ¿si o no?- Me miran ojipláticas… y yo sigo defendiendo mis estupendos regalos y continúo… –porque aunque tengáis muchos zapatos vais a escoger el que mejor os combine para ir en perfecta armonía ¿No es así? Pues en la cocina sucede lo mismo. Si eliges el recipiente adecuado para cocinar tus platos, el resultado final siempre será ¡perfecto!-.
Así que no voy a esperar más y me voy corriendo a echar mi carta. Después iré a comprar los ingredientes para hornear un sabroso roscón de reyes que desayunaremos en casa la mañana del día de Reyes y que espero acompañar de un fabuloso café preparado en mi nueva cafetera. ¡Ojalá me la traigan!
Y vosotros, ¿qué vais a pedir a sus Majestades?
Hola Margarita!!!
No había leído este post que me aparecía ahora en sugerencias .Me ha encantado y me he sentido cien por cien identificada con lo que dices pues ,por suerte para los nuestros, yo también soy de las que se ilusionan más con estos artículos de cocina que con cosas para mí , además la realidad es que con “esa fuente ,rustidera , tartera o lo que sea” ayudaremos a tener momentos de felicidad en nuestro hogar disfrutando, y degustando , juntos de nuestras preparaciones …. Cuánto me gusta sorprenderles con cosas ricas !!!!
Un beso y feliz semana!!!
Muchas gracias,Ana.:)))) Mi cocina es todo un tetris de artículos para cocina, me siento súper feliz cada vez que incorporo algo nuevo. :)))
Feliz semana para ti también!!!