Lava muy bien los pimientos rojos o sumérgelos en agua con unas gotas de lejía durante un par de minutos. Sécalos con un paño limpio, dispónlos en una fuente de horno y deja caer sobre ellos un zigzag de aceite de oliva virgen extra.
Introduce en el horno precalentado a 180º durante una hora y media aproximadamente. (el tiempo dependerá de su tamaño).Una vez enfríen retira la piel, las semillas y córtalos en tiras.
Presenta los pimientos con su jugo en una fuente. Sazona al gusto, añade la cebolla roja cortada en brunoisse, los ajos muy picaditos, las avellanas machacadas, un poco de sal y un generoso cordón de aceite de oliva virgen extra.