En una sartén junto a dos cucharadas generosas de aceite de oliva rehoga las chalotas cortadas en tiras. Cuando estén brillantes añade las espinacas, la cúrcuma, la sal de ajo, la sal común y la pimienta. Mezcla para integrar los ingredientes y cocina hasta que la hoja de la espinaca marchite.
Transfiere el resultado a un vaso batidor y agrega el queso junto a la nata. Bate la mezcla hasta conseguir una suave crema. Si la prefieres más líquida, puedes añadir un poquito de leche de avena.
Es el turno de los espárragos. ¡Se nota que están en plena temporada! Verdes, firmes, crujientes. Por cierto, crudos en ensaladas no debes perdértelos.Pon a fuego vivo una sartén grillada o normal con un cordón de aceite de oliva. Distribuye los espárragos y deja que se marquen. Es mejor que estén crujientes por lo que con un par de minutos por cada lado será suficiente. Salpimienta al gusto. Coge tus chips, espolvorea pimentón dulce o picante (según te guste) y pon un ligero cordón de aceite de oliva. O bien, haz como Juan Pozuelo; mezcla en un biberón de cocina el pimentón con el aceite y sírvete al gusto.
Presenta extendiendo la salsa de espinacas a un lado del plato, coloca los verdes y crujientes espárragos, las chips, y disfruta de este sencillo y riquísimo plato.¡Superior!