En una cazuela alta rehoga en aceite de oliva la zanahoria, la cebolla y el apio cortado en pequeños dados. Cuando comience a estar brillante y suave añade la panceta de cerdo cortada en pequeños y finos tacos. Fríe todo junto durante 3 minutos removiendo ocasionalmente.
Ahora sube la intensidad del fuego e incorpora la carne picada revolviendo hasta que quede suelta. Sazona al gusto.Este paso es muy importante, ya que si no se hace correctamente el agua de la carne y las verduras puede hacer que tu boloñesa quede demasiado líquida y con mucho menos sabor. Así que dedica al menos treinta minutos en freír muy bien la carne para que quede bien dorada y sin nada de líquido Vierte el vino dejando unos minutos para que los líquidos vuelvan a evaporarse y escuches un ligero chisporroteo.
Lava y ralla los tomates, después pasa el resultado por un colador de malla fina hasta obtener un puré de tomate.
Incorpora a la cazuela junto al resto de los ingredientes y cuando tome temperatura cubre ligeramente con una tapadera dejando que salga el vapor. Cocina suavemente durante al menos dos horas y remueve ocasionalmente verificando que la intensidad del fuego es correcta.
Sabrás que tu salsa boloñesa está lista cuando se formen pequeños volcanes…y al remover obtengas una boloñesa con cuerpo.
Pon una gran cacerola con abundante agua a hervir y cuando esté en el punto más alto de ebullición incorpora los espagueti. Como son muy largos deja que ablande la parte en contacto con el agua y después presiona delicadamente con una cuchara de madera para empujarlos y que queden todos cubiertos por el agua. Cocina hasta obtener el punto al dente.
Presenta los espagueti con una generosa cantidad de salsa boloñesa...parmesano recién rallado, y por favor, hazme caso ¡¡disfrútalos, y mucho!!