Hierve abundante agua con un poquito de sal y una hoja de laurel para perfumarla sutilmente. Incorpora los linguini y cocina hasta que estén al dente. Después escurre y reserva una vasito de liquido de la cocción.
En una sartén rehoga suavemente la cebolla laminada con cuatro cucharadas de aceite de oliva.
Añade el beicon cortado y remueve durante un minuto para que desprenda su delicioso aroma ahumado.Vierte la leche evaporada, la nata y cocina todo junto durante 2-3 minutos. Bate la yema de huevo con cinco cucharadas de agua de la cocción e incorpora a la sartén. Sazona al gusto de nuez moscada, pimienta y sal. Remueve constantemente para integrar y pasados dos minutos retira del fuego.
Lava y parte en pequeños ramilletes el brócoli. Pon agua a hervir y sumerge el brócoli durante 30 segundos para conseguir una verdura crujiente con un intenso y hermoso color verde.
Integra el brócoli con la carbonara, los linguini, unas hojas de rúcula y un poco de parmesano recién rallado.