D escubrir tu pasión pasados los 40 es toda una suerte, y yo, me siento realmente afortunada porque la vida me ha dado el inmenso regalo de reinventarme profesionalmente con lo que más me gusta: cocinar.
Anteriormente y durante veinticinco años he estado dedicada a la producción del teatro y la televisión, donde he tenido la oportunidad de trabajar con algunos de los directores, actores y actrices más importantes de nuestro país. Por circunstancias de la vida esa etapa se cerró de repente dando un enorme portazo que me dejó sin aliento.
Fueron meses complicados y de gran incertidumbre hasta que un día mi exmarido, que me conoce muy bien, después de una larga conversación me dijo: «¿por qué no te pones a crear recetas?, siempre que cocinas estás contenta…» Lo medité durante unos días y al final decidí dirigir mis pasos hacia éste nuevo camino.
Comencé a dar vida a Gastroamantes en el verano de 2014 y sin darme cuenta todo comenzó a tener otro color. Cocinar se volvió en un momento aún más mágico en el que disfrutaba y me sentía completamente realizada. Me puse a estudiar fotografía y a investigar sobre las gastronomías del mundo procurando extraer lo mejor de cada una de ellas. Leía libros de cocina que se acumulaban en mi mesita de noche, veía programas de televisión donde grandes chefs exhibían todo su talento y poco a poco fui adquiriendo conocimientos que me han hecho crecer, prosperar y sanar a través de los alimentos.
Pasado el primer aniversario de Gastroamantes surgió la oportunidad de crear contenidos gastronómicos para distintas empresas de alimentación y me puse a fabricar ideas para ellos. Hoy grandes marcas siguen confiando en mi para obtener una relación más personal con sus clientes a través de su producto.
En 2016 Telemadrid me ofreció presentar una sección en el programa ‘Madrid Contigo’ que dirigía y presentaba Inmaculada Galván. Cada semana cocinaba desde mi casa alguna de mis recetas más destacadas inspiradas en la mejor dieta del mundo, ¡la mediterránea!
Terminada mi etapa en televisión di el salto a la radio con el programa de ‘Buenos días’ de Onda Madrid que presentaban Alipio Gutiérrez y Begoña Tormo. Con ellos compartía micrófono todas las semanas para contar a los oyentes como cocinar recetas saludables, sencillas y rápidas, y dar a conocer los mejores trucos para hacer la vida más fácil de todos los que nos escuchaban.
A día de hoy sigo colaborando los miércoles en Onda Madrid y está vez lo hago de la mano de la gran Ely del Valle en su programa Buenos días, Madrid y los jueves, comparto Rincón Gastronómico con el sociólogo, nutricionista y ya amigo, Miguel Ángel Almodóvar. Juntos hablamos en el programa de Nieves Herrero, Madrid Directo, de las maravillas del buen yantar. Con él, cada semana mis conocimientos sobre nutrición e historia de la gastronomía crecen a pasos agigantados y me siento afortunada de estar con todo un gurú, experto en el arte culinario.
He publicado algunas de mis mejores recetas en el magazine Loff.it, estilo de vida, y en la actualidad puedes leerme en el periódico digital EsDiario donde vas a encontrar un montón de fabulosas ideas saludables para ti y tu familia.
He dado luz a un delicioso libro ‘La dieta, ¡que sea mediterránea’! con la editorial Oberon que es una auténtica maravilla y todo un regalo para los amantes de las recetas saludables. En sus páginas descubres exquisitos aperitivos para tomar de un solo bocado, primeros platos sencillos y apetecibles, recetas al horno especialmente sabrosas y dulces que son toda una provocación.
Su presentación oficial fue en Boadilla del Monte, donde actualmente vivo. Su alcalde Antonio González Terol nos cedió uno de los increíbles salones del Palacio Infante Don Luis y tuve la suerte de contar con unos maestros de ceremonias a los que admiro y quiero profundamente: Juan Carlos Pérez de la Fuente y David Botello.
Mi querido amigo, el gran barítono Antonio Torres y mi hermana Nieves fueron los encargados de poner música a este instante de felicidad plena que me hizo sentir afortunada y agradecida a la vida. Fue un día brillante, mi familia, mis amigos y toda mi gente querida estaban allí.
Como dato curioso sobre mi os contaré que mi abuela fue durante años cocinera de nuestro rey emérito Don Juan Carlos, y gracias a ella, a las habilidades innatas que me ha transmitido mi madre con todo su amor, y a la perseverancia que he aprendido de mi padre, siento que cocinar es una de las mejores maneras de conservar nuestro pasado, de transferir una herencia y de abrazarnos a nuestros recuerdos.
En mi camino he dejado atrás un cáncer y algunas puertas cerradas de las que siempre guardaré la llave. Ahora continúo hacia adelante con decisión, deseando seguir entre el calor del fuego y los aromas de la buena comida.
Mi gran impulso es mi familia; mi hijo, mis padres, mis hermanos, mis sobrinos, mis cuñados y mi perrito Brave. Ellos aportan a mi vida estabilidad, ellos son los que realmente me sostienen cuando caigo y estar cerca de cada uno de ellos es una inmensa bocanada de aire puro.
Solemos reunirnos a menudo alrededor de una mesa para disfrutar de una buena comida. Siempre hay un motivo para juntarnos todos y bien lo hacemos en casa de alguno o salimos al campo a disfrutar del frescor de las montañas.
Los cumpleaños y las Navidades son muy especiales para nosotros, nos dividimos las tareas y nos ayudamos para que todo salga perfecto. Tanto mi madre como mis hermanas son excelentes cocineras, así que en esas reuniones salimos todos bien saciados de comer cosas ricas. Formamos un gran equipo al que todos nos sentimos orgullosos de pertenecer.
Cada receta, cada imagen y cada palabra que escribo cada día de mi vida, está abrigada por el irrefrenable entusiasmo de mi hijo Álvaro y la preciada, necesaria e indispensable ayuda de mi ahora gran amigo, Álvaro de los Santos. Sin ellos nada de esto habría sido posible.
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