Esta es sin duda una de mis mejores recetas de mini muffins de arándanos y los amo desde la primera vez que los hice. Son tiernos, ligeros, dulces y pequeños, el capricho perfecto que más de uno desearía llevarse a la boca a cualquier hora del día. Su textura esponjosa, su delicioso sabor y su aroma son los favoritos de mi familia.
Una masa sencilla de hacer que se hornea rápidamente y que sin dudarlo un segundo se volverá la niña mimada de tu recetario. Todos sus ingredientes son súper básicos y fáciles de encontrar en estos días y si por un casual te quedaste sin cápsulas, como yo, no te preocupes, puedes hacerlas con papel vegetal. Corta cuadrados de 9 centímetros, ponlos sobre la base de un vasito de chupito, dobla con firmeza para marcar los dobleces y coloca dentro de tus moldes. Si tienes niños pequeños en casa ellos pueden ser los encargados de hacerlos, será una manera de que estén entretenidos.
En caso de que no tengas papel siempre puedes engrasar el molde con mantequilla y dejar caer un poco de harina, de esta manera la masa no se pegará y podrás desmoldarlos sin dificultad.
Endulza tus días de confinamiento con estos maravillosos muffins de arándanos y su crujido deliciosamente dulce en la parte superior. Creo firmemente que deberías hacerlos y si lo deseas, puedes usar otras bayas como frambuesas, moras e incluso fresas o convertir su masa en un deslumbrante bizcocho.
Mini muffins de arándanos con cubierta crujiente
Ingredientes
- 1 y 1/2 tazas harina normal
- 3/4 taza azúcar
- 1/2 cucharadita sal
- 2 y 1/4 cdas levadura en polvo
- 1/2 taza aceite de girasol
- 1/2 taza leche semidesnatada
- 1 huevo
- 2 cdas esencia de vainilla
- 1 taza generosa arándanos pequeños
Para la cubierta crujiente
- 1 cda mantequilla
- 2 cucharaditas canela
- 5 cdas de azúcar vainillada o normal
- 5 cdas harina normal
Elaboración paso a paso
- Mezcla todos los ingredientes de la cubierta hasta conseguir el aspecto de tierra húmeda y reserva. Dependiendo de la clase de mantequilla es posible que necesites más azúcar y harina, agrega algo más si es necesario.
- En un bol combina harina, azúcar, sal y la levadura en polvo.
- En otro bol bate el huevo con la leche, el aceite y la esencia de vainilla.
- Vierte los ingredientes líquidos sobre los sólidos y mezcla únicamente hasta integrar, sin pasarte, ya que si mezclas en exceso no quedarán tan esponjosos.
- Agrega los arándanos y remueve la masa solo hasta sumergirlos ligeramente. Si alguno de tus arándanos son muy grandes, córtalos por la mitad.
- Rellena los moldes tres cuartas partes.
- Deja caer sobre ellos la tierra dulce.
- Introduce en el horno precalentado a 180º durante 12-13 minutos.
- Retira enseguida a una rejilla para que enfríen o de lo contrario continuará su cocción dentro del molde y se secaran.
- Dorados, tiernos y sabrosos.
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